Cuenta 140 Micropoesía. La vuelta

 

Lo que más me gusta de participar en el concurso Cuenta 140, además de poder leer los versos que generosamente comparten otros compañeros, es aprovechar la oportunidad que me brinda para escudriñarme por dentro. Explorar, recorrer, descubrir espacios de mi interior ya olvidados, o no tenidos en cuenta o tal vez ignorados. Sacar hacia afuera lo bueno y lo malo, lo bonito y lo feo, lo grande y lo pequeño, lo conocido y lo ignoto. Y en este viaje espero poder crecer, aunque solo sea un centímetro.

                                        

Empezó Joaquín Pérez Azaustre, para iniciar esta segunda edición de Cuenta 140, proponiendo como tema de inspiración: La Vuelta

Para vencer la timidez suelo echar mano de diversas máscaras y tuve la fortuna de que Joaquín eligiera como finalista al que descansaba a la sombra de Tuzun Thune, además de premiar otros dos de ellos con un par de jugosos comentarios.

116 de Tuzun Thune

Lágrimas negras se enfrentan a la comitiva
Palomas ávidas por aliviar excrementos
La estatua del tirano regresa a la plazuela.

Muy bueno. El tercer verso, con esa claridad de pesadumbre, redondea su expresionismo potente y muy verbal, visual y sonoro. Podemos habitarlo.

66 de Lagartojuancho

Murciélagos en el armario
Añoranza pródiga
Sombra inmortal de tu regreso.

Muy buenos esos "Murciélagos en el armario". Es una imagen gótica. Un poema dentro del poema.


258 de Arma Dillo

Funciona la llave después de tantos años
Todo permanece igual. Los ceniceros en su lugar.
aunque yo haya dejado de fumar.

Muy bueno el primer verso. Me recuerda a un relato de Ryszard Kapuscinski en "Imperio", cuando una mujer que abandona su casa, porque el pueblo se ha quedado desierto, al cruzarse con el autor y saber que va para allá le da su llave, para que se hospede en su casa. Ya sé que la expresión es muy sencilla, pero ahí está su carga.